En la ciudad de Toronto, Canadá, se ubica esta magnífica casa de arquitectura tradicional cuyos interiores han sido íntegramente renovados, modificando la distribución original de los ambientes y creando un estilo minimalista que combina elementos decorativos escandinavos y japoneses.
En todos los espacios de la vivienda la madera es la gran protagonista, aportando calidez y continuidad a la decoración. La cocina está compuesta por un conjunto de muebles que forman una alargada encimera de mármol negro y una funcional isla de cocina (foto de abajo).
Un patio interior minimalista que durante los meses cálidos puede integrarse a la vivienda mediante puertas-ventanas que se pliegan completamente. Un aspecto interesante de esta vivienda es que la parte de la cocina y sala se ubicó en el último piso, mientras que las recámaras en el primero.
En la sala, un sofá de tres cuerpos en color negro contrasta con el resto de la ambientación y se convierte en el punto focal. A su lado, una clásica lámpara de pie modelo AJ diseñada por Arne Jacobsen para Louis Poulsen. Los sillones individuales son clásicos del estilo escandinavo, diseñados por Børge Mogensen.
La recámara del bebé de la familia en el mismo estilo que el resto de la casa. Las puertas corredizas permiten ahorrar metros y hacen recordar a las tradicionales puertas de las casas japonesas.
El cuarto de baño compartimentado al que se accede desde la recámara matrimonial y la del bebé, diseñado íntegramente en madera, incluida la bañera.
Vista del exterior de la vivienda (el edificio pintado de blanco). En la planta baja funciona un negocio de accesorios y decoración de la misma familia.
Fotos de studiojunction.ca